Ralph Lauren presenta su línea de otoño 2019

GVM Staff | 11 de septiembre de 2019

Ralph Lauren piensa en la moda en términos cinematográficos. Más allá de las estrellas de cine que se alinean en su primera fila, la magia de Hollywood nunca está demasiado lejos de su pasarela. Es por eso que el código de vestimenta para su show esa noche específicamente pedía vestimenta de noche en blanco y negro. Entrar al "Ralph’s Club", el salón de baile en Wall Street donde el diseñador celebró su espectáculo, fue como tropezar con un set de filmación de la década de 1920.

Los elegantes candelabros Art Deco iluminaron los adornos monocromáticos de la sala: elegantes banquetes de cuero blanco, pisos lacados en negro, mientras que una banda de jazz proporcionó la banda sonora cuando llegaron los invitados. La protagonista Cate Blanchett claramente recibió el memo. La actriz australiana, que fue una de las varias celebridades que asistieron al espectáculo, apareció en escena con un mono negro de estilo esmoquin para que Daisy Buchanan reconsiderara sus vestidos de solapa.

Esa silueta de diseño clásico, conocida como Le Smoking para los franceses, fue la piedra angular de la colección. Es un punto de partida natural para Lauren, quien perfeccionó su enfoque de la ropa de mujer hace 50 años adaptando las camisas y trajes de hombre, primero para su esposa Ricky, luego para Diane Keaton, quien lució algunas de sus primeras piezas en la pantalla en Annie Hall de Woody Allen.

Con un abrigo de espiga con incrustaciones de cristales sobre los hombros y una corbata de lazo para abrocharse la camisa de esmoquin, Gigi Hadid parecía estar canalizando esa energía mientras caminaba alrededor de las mesas al sonido de "Night and Day" de Frank Sinatra. - variaciones de color en el tema también, chaquetas de esmoquin satinado en rojo, azul y amarillo, aunque las más fuertes se cortaron en blanco y negro clásico, incluido uno que venía con una lujosa bata de terciopelo en lugar de un blazer.

Aproximadamente a la mitad del espectáculo, la hermana menor de Hadid, Bella, se deslizó por la pasarela, cambiando el espectáculo a toda velocidad con un vestido de lentejuelas rojo. Fue un recordatorio de que Lauren comprende el poder independiente de un hermoso vestido de alfombra roja.

Aún así, el mejor cameo de la noche estaba por venir. Con su pequeño marco posado sobre tacones de plataforma de cinco pulgadas, Janelle Monáe subió al escenario con un vestido de esmoquin de cuello halter con una ondulante falda de tul y cuadros. Interpretó una mezcla de himnos de Jazz Age, incluida una versión electrizante de "Let’s Face the Music and Dance", que puso de pie a todo el público.

Lauren, que se sentó con su familia en la multitud después de inclinarse, Parecía estar completamente inmerso en la experiencia cuando Monáe le entregó el micrófono para una sesión improvisada de karaoke. Como todos los momentos más memorables de la película, fue totalmente sin guión.